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2025 / 09 / 23

¿A los cuantos meses se puede bañar a un perro?

¿A los cuantos meses se puede bañar a un perro?

Si eres dueño responsable de una mascota, seguramente más de una vez te has preguntado: ¿cada cuánto rato debería bañar a mi perro?, o incluso si realmente es necesario hacerlo. La verdad es que el baño es parte del cuidado básico que ayuda a mantener a tu mascota limpia y saludable. Eso es importante sobre todo si tu amiguito vive en casa o departamento y comparte espacios comunes con otros miembros de la familia. A diferencia de los gatos que se limpian solos con su lengua, los perros dependen totalmente de nosotros para mantenerse en buen estado, y es por eso que es importante que todos las mamás y los papás perrunos sepan con cuánta frecuencia y a que edad se puede bañar a un perro.

Una rica ducha con agua tibia y shampoo para perros es más que necesaria de vez en cuando, y no se trata solo de que tu amigo de 4 patas huela bien. Igual de importante es el brillo y la salud de su pelaje ya que puede impactar su calidad de vida y bienestar. Por eso, es normal que surjan dudas, como: ¿a los cuantos meses se puede bañar a un perro?, ¿cuál es la frecuencia ideal según la raza o estilo de vida?, ¿qué productos usar para no dañar su piel?, ¿es mejor hacerlo en casa o llevarlo a una peluquería canina? entre otras. Sigue leyendo para descubrir todo lo que necesitas saber (y un poco más) acerca del tema.

¿Cuándo un perro necesita un baño?

Hay situaciones en las que sin importar la raza o la edad de tu perro, el baño se vuelve una necesidad. A continuación te presentamos algunos ejemplos:

  • cuando tu perro vuelve del paseo todo embarrado
  • si el pelaje empieza a enredarse, se ve opaco o dañado
  • cuando vive dentro de la casa o incluso duerme en tu cama
  • si camina por veredas mojadas o sucias después de la lluvia
  • cuando el veterinario recomienda baños como parte del tratamiento de una enfermedad en la piel

En general, los perros que pasan la mayor parte del tiempo al aire libre no necesitan baños tan frecuentes. Sin embargo, es buena idea aprovechar los días más cálidos de primavera o verano para bañarlos, y al mismo tiempo, revisar su estado de salud. Durante la limpieza puedes observar si tu mascota tiene bultos, irritaciones o infecciones que de otra forma pasarían desapercibidas y actuar con antelación frente a algún peligro de salud. Recuerda siempre que bañar a tu perrito demasiado seguido puede debilitar su piel y afectar sus defensas naturales.

A los cuantos meses se puede bañar a un perro

¿A qué edad se bañan los perros?

El primer baño del cachorro

Algunos perros aman el agua y disfrutan de cada baño como si fuera un juego. Otros, en cambio, apenas ven la ducha o la tina, salen arrancando como si fuera un castigo. Por eso es clave empezar a acostumbrar a tu perro a la higiene regular desde temprano: enseñar al cachorro que ducharse es parte fundamental de su cuidado.

Para no asustar y traumar al perro lo ideal es introducirlo de a poco; primero, con pequeñas etapas que le permitan conocer el agua sin miedo. Después, reforzar cada avance con premios para perros o caricias. Así, el cachorro irá asociando el baño con una experiencia positiva y segura. Con el tiempo, esto hará que bañarlo no sea una constante pelea, sino un momento tranquilo y hasta agradable para ambos. En la práctica, lo que lograrás es que tu perro se sienta cómodo en la tina, pierda el temor al agua y no vea la rutina de limpieza como algo incómodo, sino como un proceso necesario para cuidar su bienestar.

¿Desde cuándo se puede bañar a un cachorro?

En general, no se recomienda bañar a un cachorro demasiado pronto (no antes de los tres meses de edad), salvo que sea realmente necesario, y siempre asegurándose de que tu perrito ya tenga todas sus vacunas al día. Esto es importante porque antes de completar el calendario de vacunación, su sistema inmune todavía es débil y un baño podría bajar aún más las defensas. 

Si por alguna razón necesitas bañarlo antes de ese tiempo, lo ideal es que la ducha sea breve y muy delicada sin mojarle todo su cuerpo (si no es necesario). Recuerda usar agua tibia en una tina o un recipiente evitando el chorro directo de la ducha que puede asustarlo y traumarlo. La primera experiencia con la ducha debería hacerse sin shampoo; solo con agua, y si no es suficiente, puedes optar por un shampoo para perros alèrgicos, muy suave y pensado para su piel sensible.

Otro punto clave que no debemos ignorar: después del baño, el cachorro debe quedar bien seco para que no se resfríe. Una toalla suave o un secador con aire tibio a baja potencia para no asustarlo pueden ser una excelente solución.

¿A cuantos meses se puede bañar un perro adulto?

La frecuencia del baño en un perro adulto depende de varios factores: la raza, el tipo y largo de su pelaje, su nivel de actividad e incluso el lugar donde vive. No es lo mismo un perro chiquito que sale solo a paseos tranquilos por Santiago que uno activo que disfruta revolcarse en el barro o correr por el campo. Además, los peludos de pelo largo requieren más cuidados (los shih-tzus por ejemplo), especialmente a la hora de enjuagar bien el shampoo para que no queden restos de espuma que puedan irritar su piel.

Entonces, ¿a cuantos meses se puede bañar a un perro? Bueno, en términos generales, se recomienda que la mayoría de las razas no se bañen con más frecuencia que cada 3 a 6 meses. Sin embargo, según las características de cada perro, algunos podrían necesitar baños más regulares. Por lo general se suele hablar de tres rangos de frecuencia

  • baños semanales (en casos muy específicos y bajo recomendación veterinaria)
  • baños mensuales (para perros muy activos o que se ensucian seguido)
  • baños trimestrales (lo más común para la mayoría de los perros de compañía).

Recuerden que lo importante es encontrar un equilibrio: ni tan seguido como para dañar la piel y quitarle sus aceites naturales, ni tan espacioso como para que el pelaje y la higiene se deterioren.

Baños una vez por semana

Los perros con subpelo, es decir, una capa interna debajo del pelaje exterior que puede ser áspera, como en los schnauzers, o sedosa (como en el Pastor Escocese, Husky, Pastor Alemán, Golden Retriever, Akita, entre otros), no necesitan baños frecuentes: lo recomendable en estas razas de perros es bañarlos cada tres meses como máximo. Como este pelaje es corto, fino, denso y suave, funciona como un aislante natural, protegiendo al perro del frío, el calor y otras condiciones climáticas, y no necesita duchas frecuentes. Y si tu mascota vive principalmente en el patio o al aire libre, incluso podrías bañarlo cada seis meses.

Recordemos que cuando toca baño, el proceso requiere mucha paciencia, cuidado y comprensión. Es muy importante eliminar todo el exceso de agua y asegurarse de que no queden restos de shampoo o humedad en la piel, al igual que se hace con los perros de pelo largo. Así evitamos que se enfríe y que aparezcan problemas de piel, como hongos o irritaciones.

Con este enfoque al cuidado, incluso los perros con pelaje muy espeso se mantienen limpios, cómodos y protegidos de enfermedades cutáneas.

Baños una vez al mes

Los perros de pelo corto y pegado al cuerpo, como el pug o el labrador, generalmente necesitan un baño una vez al mes. Su tipo de pelaje hace que la limpieza sea más rápida y sencilla, ya que el pelo corto no retiene tanta suciedad ni tarda en secarse.

Eso sí, el estilo de vida del perro también influye: un perro muy activo que corre y juega al aire libre puede necesitar baños con más frecuencia. En cambio, si tu mascota es más tranquila y solo disfruta de paseos cortos, una rutina de limpieza mensual será más que suficiente.

En estos casos, lo recomendable es complementar el shampoo de avena con una acondicionador o crema hidratante especial para perros que ayude a mantener la piel nutrida y evitar resequedad. El baño en sí es bastante práctico: el enjuague es rápido y el secado mucho más rápido y agradable que en razas de pelo largo.

Esta rutina asegura que tu perro se mantenga limpio con el pelaje brillante y la piel protegida, sin necesidad de baños excesivos.

cada cuánto hay que bañar a un perro?

Baños una vez al trimestre

Los perros con subpelo, es decir, una capa interna debajo del pelaje exterior que puede ser áspera, como en los schnauzers, o sedosa (como en el Pastor Escocese, Husky, Pastor Alemán, Golden Retriever, Akita, entre otros), no necesitan baños frecuentes: lo recomendable en estas razas de perros es bañarlos cada tres meses como máximo. Como este pelaje es corto, fino, denso y suave, funciona como un aislante natural, protegiendo al perro del frío, el calor y otras condiciones climáticas, y no necesita duchas frecuentes. Y si tu mascota vive principalmente en el patio o al aire libre, incluso podrías bañarlo cada seis meses.

Recordemos que cuando toca baño, el proceso requiere mucha paciencia, cuidado y comprensión. Es muy importante eliminar todo el exceso de agua y asegurarse de que no queden restos de shampoo o humedad en la piel, al igual que se hace con los perros de pelo largo. Así evitamos que se enfríe y que aparezcan problemas de piel, como hongos o irritaciones.

Con este enfoque al cuidado, incluso los perros con pelaje muy espeso se mantienen limpios, cómodos y protegidos de enfermedades cutáneas.

¿Qué debemos tener en cuenta al bañar a nuestro perro?

Cuidar a nuestra mascota no solo implica saber cuándo bañarlo, sino también cuándo no hacerlo. Hay varias situaciones en las que el baño debe evitarse:

  • Antes y después de aplicar productos antiparasitarios para perros: antipulgas o garrapatas: se recomienda no bañar al perro al menos 48 horas antes y después de administrar estos medicamentos.
  • Heridas o procedimientos en la piel: el uso de shampoo puede irritar zonas con cortes, raspaduras o tratamientos recientes.
  • Vacunas recientes: después de una vacunación, lo ideal es esperar hasta 14 días antes de bañarlo.

Otro aspecto clave de lo que cada dueño de mascota debe recordar es no forzar al perro. Por ejemplo, al inicio recomendamos sólo humedecerlo con una esponja y premiarlo con un snack para perros por su buen comportamiento. Nunca lo arrojes al agua porque lo puedes traumatizar: no todos los perros saben nadar bien, y no todos entienden tus buenas intenciones. Otro consejo: durante el baño evita mojar los ojos y oídos, y asegúrate de que el shampoo no entre en contacto con zonas sensibles de tu mascota.

Antes de darle a tu perro una primera ducha ten en mente que el confort del perro es lo más importante porque de eso dependerá que acepte futuras duchas; por eso la primera experiencia es tan importante. Recuerda entonces de siempre usar productos de belleza especialmente diseñados para perros, y nunca productos para humanos. Y si tu perro tiene pelo largo, lo ideal es desenredarlo antes de ponerlo en la tina, así se asegura un lavado más efectivo y sin tirones.

Con estas precauciones, el tiempo de la ducha se convierte en un momento seguro, cómodo y hasta agradable para tu mascota.

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